sábado, 25 de septiembre de 2010

En cartel: Wall Street 2

Título: Wall street 2: el dinero nunca duerme (original: "Wall Street 2, money never sleeps")
Nota al traductor de títulos de películas: ¡Bien! ¡Vamos mejorando! Yo hubiera esperado un "Calle-Pared 2: el regreso de los codiciosos" o "Wall Street 2: Una pareja dispareja")
Medio: Cine
Sinopsis (en una línea): El muchacho idealista de wall-street intenta vengar el complot que terminó con la muerte de su mentor y al mismo tiempo hacer del mundo un lugar mejor.
Sinopsis (alternativa): El legendario Gordon Gekko, todo un ícono de la corrupción de una época (que le valió el oscar a Michael Douglas) sale de la cárcel para descubrir que sus crímenes de guante blanco de los '80s lo muestran como un cachorrito de labrador comparados con los que se hacen impunemente hoy en día...
Target: Todos los que hayan visto la primera (y recuerden lo buena que era...)

Motivación: Leí que no era tan mala
Predisposición: Neutral
Expectativas: Psé. Este muchacho de Transformers no es mi primera elección de actor principal...

Mi opinión:
La peli tiene muchos aciertos (y algunos fracasos garrafales). La actuación de M Douglas es impecable, "el muchacho" no suma pero no la caga, y la aparición sorpresa de "insertar actor sorpresa aquí" es realmente olvidable.
Como acierto muestra el mundo (¿juego?) de las finanzas desde un punto de vista interesante, junto con algunos acontecimientos recientes como la última crisis mundial de los bonos basura donde los bancos de USA le robaron el dinero al ciudadano americano directamente de su bolsillo y salieron impunes... (para que "el sistema capitalista" no colapse...).

Puntaje: 7/10

Entretenimiento: Entretenida. Da para charlar después en la cena sobre "lo perverso del sistema" con una copa de buen vino...

Conclusión y recomendaciones: Da para verla y charlar un poco.

Reflexiones:
- "No lo entendiste. Lo importante no es el dinero, lo importante es el juego.". ¡Cuanta verdad! ¿Cuantas veces nos preguntamos cual es el límite de la ambición? ¿Cuándo es suficiente? Nunca. Como un jugador compulsivo, el ambicioso no busca obtener un límite, busca siempre obtener más de lo que tiene. Citando nuevamente a la película: "Pregunta: ¿Cuál es tu número? (el del dinero que necesitas para no trabajar nunca más) Respuesta: más."
- Negocios. $1000, $1.000.000, $1.000.000.000. ¿Cuál es la diferencia? Ninguna. Escala. ¿La gente que maneja varios millones es más inteligente, capacitada, estratégica que la que maneja miles? No. Tal vez es más ambiciosa. Tal vez hizo ese "click" que permite dejar de preocuparse por la magnitud de los números y dejar que sean sólo números. Los problemas a distinta escala no cambian la naturaleza de los problemas (o de la moral...).
- "Saturno devorando a sus hijos" de Goya. Una doble metáfora dentro de la película. La obvia: el ambicioso devora a sus propios hijos. La más sutil, mitológica (que también flota en guión y los díalogos): el tiempo lo consume todo. ¿Cuál es el objetivo de construír algo sabiendo que indefectiblemente va a derrumbarse? Podemos construír para la descendencia. O yendo más lejos, si somos conscientes de que todo eventualmente es hecho para ser destruído, sólo nos resta construír porque disfrutamos de construír...
- En la tónica anterior. "El tiempo es más valioso que el dinero". Tal vez porque con tiempo se puede hacer dinero, pero la inversa nunca es válida. "Pasa tiempo con ella, y con tus hijos mientras sean pequeños". Hay cosas que no vuelven, las vivimos o las perdemos. Perspectiva en lo que es accesorio, lo que es la ocupación, y lo que es importante, lo que no vuelve. O en la boca de Shakespeare "O, call back yesterday, bid time return" ("Oh, llama de vuelta al ayer, ordena al tiempo volver").

Se me cierra la válvula:
Ay... Oliver... la vejez te trajo chochera... Ese final feliz forzadísimo después de todo lo que construíste en tus personajes... que desperdicio.